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España es una tierra de contrastes. No es un país muy grande, pero está dividido en muchas regiones, llamadas comunidades autónomas, todas ellas completamente diferentes entre sí y marcadas por diferencias no sólo culturales y geográficas, sino también gastronómicas y a veces lingüísticas. Es probablemente en esta diversidad donde España encuentra su mayor riqueza y lo que la convierte en una tierra de encanto único que merece viajar por ella.
Algunos datos locales de España
España tiene una historia sociocultural, política y artística muy compleja e interesante. Es bueno investigar un poco y conocer su cultura, sus numerosas tradiciones y sus condiciones actuales antes de viajar por España.
Plan
Un viaje es aún más agradable cuando está organizado, quizás no en detalle, pero al menos en algunos aspectos. Es importante no intentar planificarlo todo y dejar cierto margen para la improvisación durante un viaje; sin embargo, también es aconsejable tener al menos un itinerario bien definido que pueda seguir teniendo en cuenta su presupuesto y sus necesidades personales.
Dejar de lado los prejuicios
España es un país vigilado y seguro, gracias a la excelente labor de la policía: presume de un índice de criminalidad muy bajo. También cuenta con uno de los mejores sistemas sanitarios de Europa.
Visa
La mayoría de los residentes de otros países europeos no necesitan visado para entrar en España, ya que forma parte de la Unión Europea y del espacio Schengen. Sin embargo, puede permanecer en el país hasta 90 días. La moneda oficial sigue siendo el euro, aunque los mayores siguen hablando en pesetas.
Idioma
El idioma oficial es el castellano, pero está sujeto a muchas variaciones según el contexto. Muchas regiones tienen su propio dialecto, como el gallego, el vasco o el catalán. Los españoles tienen fama de hablar poco inglés, pero si preguntas por una dirección siempre estarán dispuestos a ayudarte de alguna manera.
Coste de la vida
España, en general, es uno de los países más baratos de Europa Occidental; sin embargo, los precios siempre varían en función de la región en la que decida alojarse. Cataluña y el País Vasco son las regiones más caras, mientras que Andalucía y Galicia son las más baratas.
Gastronomía
España tiene una gastronomía muy variada y rica. Es probable que vuelva con unos cuantos kilos de más después viajar por España. Es habitual que los españoles vayan a un restaurante o a un bar a tapear, es decir, a comer pequeñas porciones de comida que suelen servirse en un trozo de pan. Entre las tapas más comunes y populares están las croquetas, el pincho de tortilla, el pan tumaca, el jamón serrano, las patatas bravas o el pincho de morcilla. Es habitual y se considera casi de buena educación dejar una propina al camarero. A diferencia de muchos otros grandes países europeos, en España se suele comer más tarde: el almuerzo alrededor de las 14.00-14.30, a veces las 15.00; la merienda a las 18.00, más o menos; y la cena entre las 21.00 y las 22.00.
Transporte
España se adapta a todos los presupuestos, desde el más bajo al más alto, y a todas las necesidades sin problemas. Es un país que se puede recorrer perfectamente de norte a sur en el tren de alta velocidad español (‘Ave’), por ejemplo. A diferencia de Italia, en España la gente también utiliza mucho el taxi para ir de un lado a otro en las grandes ciudades. El transporte público es muy eficiente, aunque los costes son bastante bajos. También hay muchas tarifas reducidas. Hacer autostop es poco común y difícil.
Clima
La variedad climática también está a la orden del día y cambia según la región y la época del año en cuestión. El verano, con su calor seco, es extremadamente caluroso, especialmente en el sur y en el centro del país, con picos de temperatura que alcanzan fácilmente los 40 grados. Los meses de otoño, al igual que los de primavera, son los mejores para ir a España, ya que las temperaturas diurnas se mantienen estables por encima de los 20 grados y por la noche bajan un poco, pero no demasiado como para pasar frío. El invierno es muy frío en el norte y el centro de España, lluvioso y suele ser ventoso.
Algunos destinos
Andalucía (y el Cabo de Gata); el centro de España (Madrid, Toledo, Cuenca, Segovia, Salamanca); el País Vasco; la costa mediterránea (Valencia, Murcia, Cataluña); el noreste de España (Galicia, Asturias); las numerosas islas de España (como Mallorca, Menorca o Tenerife).
