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Una visita a Turín con niños, incluso si no se dispone de mucho tiempo, puede dar lugar a una verdadera emoción, no sólo para los adultos, incluso los pequeños turistas estarán encantados. Echemos un vistazo a los lugares que no puedes dejar de visitar.
La magia del Museo Egipcio
No importa si el viaje es de pocos o muchos días, tus hijos deben visitar el mayor museo egipcio de Europa, que se encuentra en Turín. Si están estudiando este periodo histórico en el colegio, es sin duda un regalo único para ellos poder ver en directo momias y objetos de esa época. Además, hay guías muy bien formados que le acompañarán durante todo el recorrido, ¡aquí los niños verán la momia real de la reina Nefertari!
Turín y los niños, el encanto del Museo del Cine
Si estás buscando una forma de ofrecer a los niños una experiencia única, el Museo del Cine de Turín es algo realmente único. Además del recorrido por la historia de cómo se hace una película, es el lugar mágico, la Mole Antonelliana. Después de haber hecho todo el recorrido del museo, es posible almorzar en su interior y también ver todo Turín desde arriba gracias a su hermoso ascensor panorámico de cristal, una emoción única para grandes y pequeños.
Turín y los niños, la historia del fútbol
Para los niños que aman el fútbol como deporte, una visita a Turín ofrece grandes emociones, por ejemplo, la visita a los dos hermosos estadios históricos de la ciudad. En el nuevo estadio de la Juventus hay un hermoso museo donde los aficionados pueden ver toda la historia del equipo de la Juventus.
Todo el mundo conoce al gran equipo del Torino, y acudir a Superga es una obligación para comprobar la pasión y el cariño con que los aficionados han conservado este lugar en su honor.
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