Un exuberante jardín tropical rodeado de hierro y cristal, un lugar surrealista que parece haber salido directamente de un cuento. Esta es la estación de Atocha en Madrid, que es una visita obligada al menos una vez en la vida.
La inmensa estructura de hierro y cristal alberga casi 4.000 metros cuadrados de jardín botánico, poblado por siete mil plantas. La estación de Atocha de Madrid es ahora una maravillosa escapada a la jungla del caos madrileño. Es tan relajante que te olvidarás de que estás dentro de una estación de tren.
ESTACIÓN DE ATOCHA
La estructura metálica acristalada que cubría los andenes de la estación facilitó su conversión en un invernadero con estanques. El jardín consta de 7000 plantas de 260 especies diferentes procedentes de América, Asia y Australia. Este jardín tropical se inauguró en 1992 y se creó en una sección abandonada del edificio antes de que el centro se ampliara para incluir enlaces de alta velocidad.
En la sección del arboreto encontrará muchas plantas de los bosques tropicales y podrá pasear entre frutales y cocoteros de la Polinesia, palmeras reales y caobas de Cuba, plataneros de Filipinas y plantas de Madagascar.
Hasta el año pasado, los estanques de nenúfares albergaban numerosas tortugas de agua dulce procedentes de América del Norte y del Sur, que antes eran mascotas, después de que las tortugas fueran abandonadas por sus dueños y arrojadas a la naturaleza, los biólogos las rescataron de los cauces de Madrid colocándolas en un nuevo hogar de fantasía dentro del jardín. Sin embargo, en la primavera de 2018, las tortugas fueron trasladadas a un parque de vida silvestre cercano debido al hacinamiento y la superpoblación de los estanques.
La temperatura en esta zona de la antigua estación se mantiene estable en torno a los 24 grados centígrados.
CÓMO LLEGAR
La estación está situada en el sureste de Madrid y se puede llegar a ella con la línea 1 del metro. Está muy cerca del Museo del Prado, del Reina Sofía y del Parque del Retiro, que se encuentran a pocos cientos de metros.
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